La presencia de Cristo en medio de nosotros en el prodigio de la santa cena es motivo de cántico. La cercanía de Dios en la oración, en toda circunstancia, es motivo de regocijo. La venida de uno “más poderoso” que Juan, incluso con un bieldo en la mano, es una buena noticia –y motivo de júbilo– para nosotros que estamos siendo salvados. Gran alegría es el tono del tercer domingo de Adviento.
Únase a nosotros para nuestro culto que comienza a las 12:00 p. m. en la Iglesia Luterana Atonement (1980 Silver Lake Road New Brighton, MN 55112). ¡Todos son bienvenidos!